
El 24 de Diciembre de 1996, MAURICIO RODRÍGUEZ un joven bogotano que estaba a pocos meses de cumplir los 15 años, tenía claro que una guitarra sería el regalo perfecto para iniciar su carrera como cantante. Desde los 8, ya hacía parte del coro del Gimnasio Moderno en Bogotá y sobresalía no solo por su particular timbre de voz, sino también por la forma como actuaba en el escenario. Esa noche, cuando recibió la guitarra como regalo, el sueño que planeaba realizar estaba a punto de comenzar.
Tener este instrumento en las manos se convirtió en un compromiso consigo mismo y con quienes habían conocido sus aptitudes musicales. Aunque no empezó a tocar las notas con la ayuda de un profesor, MAURICIO iba interpretando melodías que escuchaba a su alrededor.
El trabajo y la dedicación que le imprimía y el apoyo de su familia, fueron algunos de los motivos que lo llevaron a tomar la música en serio; pero para ello, sabía que debía hacer escuela en su propio entorno. Fue entonces cuando participó en varios concursos ínter colegiados. El Fundescul y Colombia Suena Bien, entre varios más, le sirvieron a MAURICIO para sobresalir en el ambiente y recibir los primeros premios de manos de selectos jurados.
Tener este instrumento en las manos se convirtió en un compromiso consigo mismo y con quienes habían conocido sus aptitudes musicales. Aunque no empezó a tocar las notas con la ayuda de un profesor, MAURICIO iba interpretando melodías que escuchaba a su alrededor.
El trabajo y la dedicación que le imprimía y el apoyo de su familia, fueron algunos de los motivos que lo llevaron a tomar la música en serio; pero para ello, sabía que debía hacer escuela en su propio entorno. Fue entonces cuando participó en varios concursos ínter colegiados. El Fundescul y Colombia Suena Bien, entre varios más, le sirvieron a MAURICIO para sobresalir en el ambiente y recibir los primeros premios de manos de selectos jurados.
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